Cuando la madre saca a los polluelos de la incubadora, Thorin está allí observando cada movimiento mientras los coloca cuidadosamente en un balde. Tan pronto como ella se los quita a todos, los lleva a una habitación diferente mientras él la sigue con atención.
Una vez allí, la madre saca a los polluelos uno tras otro y los coloca sobre la alfombra. El enorme perro mueve la cola, observa y luego huele minuciosamente a todos los polluelos, probando a cada uno de ellos.
Después de revisarlos todos, está contento con su inspección. Camina minuciosamente entre los polluelos y se estira antes de acostarse con ellos; estando seguro de que no pisa ninguno ni se acuesta sobre ninguno de ellos.
A medida que los polluelos descubren su nuevo entorno, Thorin los observa, les da algunos suaves empujones y los huele. A medida que los polluelos se reúnen alrededor de sus grandes patas, parece como si felizmente les estuviera sonriendo.
En lo que respecta a los depredadores y las presas, los polluelos no le tendrán miedo en absoluto. Caminan hasta su boca y sus patas, completamente en paz en su nuevo mundo.
Qué excelente perro es Thorin por cuidar tanto a sus pollitos. Comparta este lindo video con sus seres queridos y amigos.