Estuvo cerca el caso de Taka, un cachorro de ocho años que escapó por poco de un incendio en su casa la semana pasada. Desafortunadamente, la familia de Taka no pudo localizarlo a tiempo y tuvo que abandonar la residencia. Sin embargo, ocurrió un milagro cuando Taka logró escapar del porche por su cuenta y corrió calle abajo. Un vecino de buen corazón encontró al cachorro y lo llevó rápidamente al Care More Animal Hospital en Martinez, Georgia, donde recibió la atención que necesitaba.
Según Emily Martin, veterinaria del Care More Animal Hospital, el gato llamado Taka sufrió quemaduras en varias partes de su cuerpo, incluidos los ojos, la boca, las orejas y el vientre. Al principio, no estaban seguros del alcance de sus heridas debido a la preocupación por las quemaduras por inhalación. Los ojos de Taka resultaron gravemente dañados durante el incidente, lo que finalmente provocó que perdiera la vista. Después de experimentar problemas respiratorios, Taka fue llevado a la clínica de la Universidad de Georgia, donde recibió tratamiento con oxígeno. Finalmente, regresó al Care More Animal Hospital, donde el personal está haciendo todo lo posible para ayudarlo. Martin quedó conmovido por la terrible experiencia del gato.
Martin compartió que aunque intenta tratar a todos sus pacientes por igual, el caso de Taka le ha conmovido un poco más. Cuando trajeron a Taka, estaba gritando de dolor. Martin se puso en contacto con la familia de Taka y finalmente obtuvo la custodia de él debido a su estado de salud. Desde entonces, Martin ha asumido el papel no sólo de veterinario de Taka sino también de su madre. Para asegurarse de que Taka no tuviera que dormir solo, Martin lo llevó a casa por la noche ya que el hospital no estaba abierto las 24 horas. Al día siguiente, Martin se metió en la perrera de Taka en el hospital para dormir con él. Un compañero de trabajo capturó el conmovedor momento.
Desde la perspectiva de Martin, una de las cosas más notables de Taka es su amabilidad, a pesar de los desafíos que enfrenta. Como dice Martin, los animales suelen morder cuando están en agonía, pero Taka no mostró ningún signo de agresión ni una sola vez.
Martin, junto con otros veterinarios, tienen esperanzas sobre las posibilidades de Taka a pesar de sus quemaduras. Su capacidad para comer y usar el baño por sí solo es una buena señal, aunque aún no está claro cómo le afectarán sus lesiones en el futuro. Si bien Taka está sufriendo mucho dolor, hay optimismo de que se recuperará bien. Además, la personalidad de Taka está empezando a hacerse más notoria.
Martin describe a Taka como un cerdo porque le gusta que le froten la barriga y le gusta la comida. Además, a Taka le encanta abrazar. Martin se ha encariñado mucho con Taka y ha estado considerando adoptarlo permanentemente. Sin embargo, la madre ya tiene otros cinco perros y un bebé pequeño, lo que le dificulta brindar la atención y el cuidado que Taka necesita. Por ello, reconoce que su casa puede no ser el ambiente ideal para Taka.
Martin tiene la misión de encontrar el hogar perfecto para un perro especial. A pesar de pasar por una experiencia dolorosa y traumática, el perro no ha perdido la determinación y la fuerza. Martin lo ve como un individuo único y espera encontrar a alguien que aprecie sus cualidades. Corramos la voz sobre esta conmovedora historia y ayudemos a encontrarle al perro un hogar amoroso.